PROLOGO:
No preguntes por qué
“No Puedes ganar. Pero hay alternativas a la lucha.” — Obi-Wan Kenobi, Una Nueva Esperanza |
En Agosto del 2010, publiqué un muy
particular ensayo, algo polémico, titulado “¿Por qué Me Gusta La Amenaza Fantasma”? Me
senté a escribir mi defensa del Episodio I por motivos de frustración personal,
cansado como estaba de tanto odio y críticas dirigidas hacia lo que yo
considero es un excelente filme. Dicha
disertación salió de mí con algo de rabia y rencor, para restregar la nariz del
rostro de esa ola de críticas anti precuelas.
En otra galaxia, en otro tiempo.
La Antigua República fue leyenda, más grande que la distancia o el tiempo. No hay necesidad de saber lo que era o de donde vino, sólo hay que entender que era… LA REPÚBLICA.
Así, bajo el sabio mandato del Senado y la protección de los Caballeros Jedi, la República prosperó y creció. Pero, como suele suceder cuando la riqueza y el poder van más allá de lo admirable y alcanzan lo increíble, aparecieron aquellos cuya codicia sólo era superada por su maldad.
Así ocurrió que la República estaba en su mejor momento pero, como el más grandioso de los árboles, que es capaz de resistir cualquier ataque externo, la República se deterioraba desde adentro… aunque el peligro no era visible desde fuera.
Con la complicidad de algunos individuos con sed de poder dentro del gobierno y los masivos órganos comerciales, el ambicioso Senador Palpatine logró ser elegido Presidente. Prometió unificar a los marginados entre el pueblo y restaurar la tan recordada “Gloria” de la República.
Una vez seguro en su nuevo cargo, se declaró a si mismo Emperador, aislándose de la gente. Pronto terminó siendo controlado por los mismos asistentes y lame botas que él mismo había designado en su gabinete y los gritos de justica del pueblo no alcanzaron sus oídos.
Habiendo exterminado mediante la traición y la villanía a los Caballeros Jedi, guardianes de la justicia en la galaxia, los Gobernadores Imperiales y los burócratas se prepararon para instituir un reinado de terror entre los mundos de la República. Muchos utilizaron a las fuerzas imperiales y el nombre del cada vez más aislado Emperador para impulsar sus ambiciones personales.
Pero un pequeño número de sistemas se rebelaron contra éstos ultrajes, se declararon en oposición directa a éste Nuevo Orden y comenzaron la gran batalla para restaurar a la Antigua República.
Desde el principio estaban superados en números y en armas por los sistemas leales al Emperador. En esos primeros y oscuros días, parecía que la brillante luz de la esperanza y la resistencia iba a ser extinguida antes de poder iluminar el camino a una galaxia de individuos oprimidos y golpeados…
De la Primera Saga.
Journal of the Whills
"Estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado… y por supuesto se convirtieron en héroes." — Leia Organa de Alderaan, Senadora
Me dije que era solo un gesto simbólico
de desafío… además de una buena razón para que la gente visitara mi blog… y una forma de entretener
a aquellos que tuvieran la paciencia de leer ese ensayo tan largo que alababa
una peli que al parecer todo el mundo odia.
Estaba equivocado.
Desde que publiqué el ensayo, varias
personas que apreciaban el Episodio I igual que yo, me dieron las gracias por
poner en palabras lo que ellos también admiraban de la peli e incluso algunos
me dijeron que los había convencido de que no era tan mala en realidad y sólo
uno o dos me llamaron idiota… lo cual considero una victoria.
Tal reacción positiva aún me sorprende
e inspira, así que he decidido escribir un ensayo similar sobre el Episodio II
de ésta saga: “El Ataque de los Clones”
La primera decisión que tome con respecto
a mi análisis del Episodio II fue cambiarle el título. "¿Por Qué Me Gusta La Amenaza Fantasma?"
era un título que pretendía causar shock, algo parecido a proclamar ¿Por Qué Me
Gusta Hitler? o ¿Por Qué Me Gusta La Mierda de Perro? Pero de
pronto entendí que no quería escribir una continuación que se llamara ”¿Por Qué
Me Gusta El Ataque de los Clones?” Ya no siento la necesidad de defender mis
gustos o de convencer a alguien de cuánta razón tengo… Ese motor no solo se
quedó ya sin gasolina, sino que partió la base de la caja y ya no enciende más. Mi admiración por éstas películas no es algo
que deba justificar, simplemente quiero explorar sus significados yasí ayudar a los
lectores interesados a apreciarlas. Por
lo tanto, no pienso tomar una postura defensiva para racionalizar por qué me
gustan.
No hay un por qué… simplemente me
gustan.
Escribir ésta disertación será una tarea mucho más difícil sin el combustible de la rabia y la agresión. Yoda tenía razón: "Con fluidez, surgen, rápido
se unen a ti en una pelea" Pero he
decidido arrojar mi sable laser y enfrentarme al Imperio del Mal desarmado,
rehusándome a utilizar sus métodos. Por ende, éste ensayo puede que me tome más
tiempo de lo normal terminarlo, pero creo que el resultado será mucho más
fuerte y más sofisticado de lo que sería si tomara el camino rápido y
fácil.
Pero eso se los dejo a ustedes, queridos
lectores, que tendrán la palabra final. Ésta
disertación tendrá la misma estructura que el anterior, es decir, serán dos
trilogías: Las Partes del I al III se enfocarán en la trama y la narrativa
desde una perspectiva racional y las Partes del IV al VI explorarán los temas y el simbolismo del
filme.
Para proporcionarle a ésta disertación
una “obertura” adecuada al caso, quisiera culminar ésta introducción presentándoles
el prólogo de lo que fue llamado Journal of the Whills de la novelización
original de STAR WARS: De Las Aventuras de Luke Skywalker de 1976. Escrito por Lucas y Alan Dean Foster basado
en las notas de George. Las referencias a la Antigua República demostraron ser
muy exactas y relevantes para las precuelas, estrenadas más de 20 años después.
Por supuesto, hay algunas diferencias
entre lo que cuenta éste Journal of the Whills y lo que terminó ocurriendo,
pero es admirable lo claro que estaba Lucas acerca de qué ocurrió y cómo cayó
la República.
La Antigua República fue leyenda, más grande que la distancia o el tiempo. No hay necesidad de saber lo que era o de donde vino, sólo hay que entender que era… LA REPÚBLICA.
Así, bajo el sabio mandato del Senado y la protección de los Caballeros Jedi, la República prosperó y creció. Pero, como suele suceder cuando la riqueza y el poder van más allá de lo admirable y alcanzan lo increíble, aparecieron aquellos cuya codicia sólo era superada por su maldad.
Así ocurrió que la República estaba en su mejor momento pero, como el más grandioso de los árboles, que es capaz de resistir cualquier ataque externo, la República se deterioraba desde adentro… aunque el peligro no era visible desde fuera.
Con la complicidad de algunos individuos con sed de poder dentro del gobierno y los masivos órganos comerciales, el ambicioso Senador Palpatine logró ser elegido Presidente. Prometió unificar a los marginados entre el pueblo y restaurar la tan recordada “Gloria” de la República.
Una vez seguro en su nuevo cargo, se declaró a si mismo Emperador, aislándose de la gente. Pronto terminó siendo controlado por los mismos asistentes y lame botas que él mismo había designado en su gabinete y los gritos de justica del pueblo no alcanzaron sus oídos.
Habiendo exterminado mediante la traición y la villanía a los Caballeros Jedi, guardianes de la justicia en la galaxia, los Gobernadores Imperiales y los burócratas se prepararon para instituir un reinado de terror entre los mundos de la República. Muchos utilizaron a las fuerzas imperiales y el nombre del cada vez más aislado Emperador para impulsar sus ambiciones personales.
Pero un pequeño número de sistemas se rebelaron contra éstos ultrajes, se declararon en oposición directa a éste Nuevo Orden y comenzaron la gran batalla para restaurar a la Antigua República.
Desde el principio estaban superados en números y en armas por los sistemas leales al Emperador. En esos primeros y oscuros días, parecía que la brillante luz de la esperanza y la resistencia iba a ser extinguida antes de poder iluminar el camino a una galaxia de individuos oprimidos y golpeados…
De la Primera Saga.
Journal of the Whills
"Estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado… y por supuesto se convirtieron en héroes." — Leia Organa de Alderaan, Senadora